Pulpa PVC

Auto entrevista. Junio 2022


Estamos muy contentos porque hoy entrevistamos un artista de la casa. Un artista muy querido quien se encuentra en un período de bastante actividad y es por eso que queremos adentrarnos hoy, en todo lo que es su universo de creación artística. Con ustedes, Javier Mansilla – es decir yo mismo- artista visual, cuya labor se desarrolla en múltiples lenguajes y que hoy nos presenta su último trabajo; Pulpa PVC, próximo a exhibir en la Biblioteca Pablo Neruda, en la comuna de Independencia. 


Pulpa PVC es un proyecto, que en palabras del propio artista son, “esculturas muy políticamente correctas”, cuéntanos, Javier, a qué te refieres con eso porque la verdad es que conociendo tu trabajo, nos cuesta creer que vayas por el camino de lo políticamente correcto.


JM: Bueno, a ver, debo reconocer que tal como tú dices, soy un rebelde, qué te puedo decir, soy un caso. Pero a lo que me refiero con que son esculturas que resultan de operaciones archiprobadas, como la recolección de material de desecho, o el uso de material industrial, el uso de materiales encontrados. Son operaciones antiguas, probadas, se sabe que funcionan y bueno el montaje tiene un look medio minimalista que sigue de moda como desde hace sesenta años. Por eso digo que son políticamente correctas. Además estoy trabajando con cáscaras de palta, y hace un par de años, Livia Marín hizo una exposición que se llamaba Oro Verde en Patricia Ready, asique estoy repitiendo patrones, estas esculturas, que usan el mismo material, podría decirse incluso que son un plagio.

JM: Ya, ¿Pero son un plagio realmente? ¿Conoces a Livia Marín? ¿Existe la posibilidad de que ella te haya robado la idea?


JM: Sí la conozco. Adoro su trabajo. Pero es muy probable que ella no se acuerde de mí. La tuve de profesora en la Uniacc. La recuerdo con cariño. Fue una súper buena profe y tuvimos una muy buena relación. Yo entregaba buenos trabajos y me sacaba buenas notas, hasta que para una entrega trabajé poco, traté de defender lo indefendible, me hizo críticas duras que no pude aceptar y hasta ahí llegaron nuestras buenas relaciones. De hecho el encargo siguiente fue volver a hacer un trabajo de primer año como castigo. Eramos un curso bien flojo.


JM: Ya, ¿Entonces te robo la idea?


JM: No no me la robó. Ella lo hizo primero. Pero cuando inauguró Oro Verde yo ya había empezado a recolectar mis cáscaras de palta sin saber que ella también estaba trabajando en lo mismo y bueno, creo que por esa época la palta ya estaba empezando a subir de precio y a estar en entredicho por los problemas de acaparamiento de agua en el valle del río Aconcagua, entonces, creo que estábamos todos atentos a ella. Yo llegué a interesarme en la cáscara de palta como material simbólico por devenires exclusivamente domésticos. Creo que si bien hay un discurso o declaración política al usar las paltas -que tiene que ver inequívocamente con problemas medioambientales- es evidente también que hay tratamientos diferentes que se valen y apelan a sensibilidades diferentes. Aunque creo que, fuera del discurso medioambientalista, hay una sensibilidad similar -entre Livia y yo- en la relación con la materia, el objeto.


JM: O sea sí es plagio


JM: No. El plagio es consciente y esta fue una bonita casualidad. Por lo demás, la crisis medio ambiental, queramoslo o no es EL problema que nos concierne a todes ahora. Artistas o no. Es la gran urgencia que atender. Dada así las cosas, es más que probable que hayan coincidencias así de específicas.


JM: ¿Es esta auto-entrevista un disclaimer para aclarar que Pulpa PVC no es un plagio, y que cuando Livia Marín inauguró Oro Verde tú ya te encontrabas trabajando con cáscaras de palta?


JM: ¿Sabes? Quizás sí lo sea. Quizás necesito librarme del fantasma de la copia. Quizás me aterra que me acusen de plagio y necesito aclarar que yo nunca, jamás incurriría en una bajeza tal. Pero también me interesa entrar en detalles más específicos de la obra, que ya poco tienen que ver con la figura de Livia Marín.


JM: ¿ A ver, como cuáles?


JM: Como la insistencia con la bolsa de plástico o la insistencia con el material orgánico o la insistencia con la mezcla de ambas materialidades.


JM: Tienes razón, es importante que lo menciones, porque ahora que lo dices recuerdo que tu exposición anterior, Proyecto Por Favor, en Instituto Tele Arte, también conjugaba estas dos materialidades; orgánico versus sintético, y también tenía a la bolsa de basura como uno de sus elementos principales, pero en ese caso estaba todo trabajado desde el código de la pintura. ¿Entonces en Pulpa PVC estará todo trabajado desde el código de la escultura, o también podremos ver cruces?


JM: Te recuerdo que Proyecto Por Favor, si bien estaba trabajado desde el código de la pintura, tenía una fuerte presencia objetual. No eran simples cuadros colgados al muro. Las pinturas estaban sostenidas por estructuras construidas de manera bien bruta, con un gran componente escultórico y espacial.
Para el caso de Pulpa PVC, efectivamente el origen del trabajo es escultórico, objetual. No hay representación ni figuración. Pura presentación. Ahora, igualmente podríamos encontrar guiños pictóricos, en tanto el montaje de las esculturas es todo a muro y no en el centro de la sala. O la cuestión cromática que se dé en la composición y montaje de las piezas. Esas podrían ser características de la pintura, pero creo que estoy pensando esto más desde la escultura.


JM: ¿Te interesa demarcar bien los límites entre disciplinas, o luchas por borrarlos y encontrar cruces, puntos medios, terrenos ambiguos?
 
 JM: Las luchas van mutando en el camino del samurai. Pequeñas batallas -a veces por un bando, ortas por el bando contrario- que se suman y hacen una gran batalla. La batalla de la vida ¿síono? Efectivamente he estado muy ocupado en intentar encontrar una cruza entre pintura y escultura, o buscando las propiedades volumétricas en la pintura, desde que salí de la escuela hasta hoy. Es sano para el trabajo artístico proponerse objetivos, metas, pies forzados, marcos teóricos, Pero creo que fundir los límites o trabajar en una disciplina de manera tradicional es algo que simplemente sucede, no debería buscarse a priori. O bueno, en verdad depende. Siempre depende. En fin, creo que lo que quiero decir es que cada idea tiene su manera de existir en el mundo y los humanos, los artistas, debemos tener la libertad de hacerlas existir como podamos, combinando nuestros saberes y los recursos disponibles. Me encanta la pintura, me encanta leer novelas. Hay que saber sentirse libre de pintar un cuadro un día, escribir una novela el otro o presentar algo que sea un punto medio entre una y otra y que el gol sea la obra terminada o el proceso de investigación, más que haber quebrado las categorías.


JM: Específicamente sobre esta muestra. El título, ¿A qué alude?


JM: Creo que es bastante claro, alude a una imagen que reúna, junte, mezcle, yuxtaponga materia orgánica con plástico, propone una pulpa de plástico, una fruta plástica. Una ficción -ya cada vez más real- de la naturaleza y los procesos biológicos integrando el plástico. Para mí es como una imagen exacerbada del microplástico, que ya se encontró en el torrente sanguíneo humano o en el líquido amniótico, además de en la carne de los peces. Ahora, volviendo a los títulos, una posibilidad era “Flores Secas”, como la canción de Los Tres, pero quise hacerle el quite a usar títulos de canciones célebres para evitar clichés o atajos. Normalmente funcionan bien, pero quise evitar ese recurso que ya usé alguna vez.


JM: ¿cómo sabes cuándo estás incurriendo en un cliché?
 
 JM: … ¿y tú me lo preguntas?